La fiesta había empezado a las diez y ella llegó a las once. Ya estábamos todos, o casi todos: faltaba ella.
Ella era toda una princesa; mejor dicho, era una princesita: por lo pequeña, menuda y risueña. Y posmoderna: no andaba con su séquito, andaba sola y torpe. Era hermosísima. Llegó a la fiesta sola, sin su novio. Qué raro, pensamos todos. No llegó con amigas, tampoco. Llegó sola en un taxi. Creo que llegó un poco entonada porque al rato ya era la reina de la fiesta. Se adueñó de todas las miradas, hablaba con todo el mundo, se reía como loca con una risa contagiosa e hilarante... Era un show de socialización, música y baile... Relamente era encantadora. No daba celos ni generaba incomodidades, sólo creaba un clima ameno a su alrededor, en todo el entorno...
Y nos dieron las doce y la una y las dos y las tres... Y la princesita corría el riesgo de volverse cenicienta, se le estaba por acabar el hechizo.
Y nos pusimos a charlar un rato nosotros dos solos de esto y de aquello... Ella se veía cada vez más linda y encantadora. Se reía y se divertía, se veía rozagante. Pero ella se empezó a inquietar. Su novio la había dejado salir sola, pero no sabía nada de ella: creo que nunca se imaginó que la estuviera pasando tan pero tan bien sin él.
Dejá, yo te llevo, le dije para que no se impacientara.
No te preocupes: si querés nos quedamos un rato más y cuando quieras te llevo a tu casa. O si querés podemos irnos a mi casa. Como vos quieras.
¿No soy un príncipe posmoderno yo también? ¿No soy un encanto?
¿Cómo creen que siguió la historia?
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Se fueron a un castillo, ella dijo "bueno principe aca te dejo".. y despues se fue al mundo real a hacer el amor ocn su novio....
ResponderEliminarAlgo así... Igual no perdió su encanto.
ResponderEliminarahhhh, yo pensé que habías tenido suerte, "haciendo el amor"
ResponderEliminarUy, Protervo... Qué bueno que te imaginaste un final tan bueno... Pero pasó otra cosa. Más bien, no pasó nada de eso. Je.
ResponderEliminarUn final muy comun en tales casos
ResponderEliminarlas princesas nos conquistan
nos elevan y luego pfff adios
hay algo mejor, o almenos ellas
lo perciben asi. Igual les pasa a
las chicas cuando encuentran un principe
ya sea posmoderno o anticuado
solo que por lo general esos principes
son los novios.
Sí, nosotros somos todos unos caballeros... Unos "divinos totales"...
ResponderEliminarche... a veces el principe es el q la rescata del novio...
ResponderEliminarLud, ¿Querés que te rescate?
ResponderEliminarDecime cuándo y dónde.
opa... esa seguridad da q pensar.
ResponderEliminarLud, así soy ¿te animás?
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